El Colectivo Estudiantil de Ciudad Real nació a partir de un grupo de estudiantes que se vio en la necesidad de unirse con el fin de organizar una respuesta a los continuos ataques que viene recibiendo la educación pública. Superando así la tradicional apatía, conformismo y resignación característica de los campus, institutos y centros educativos de la provincia; con el objetivo formar una nueva plataforma reivindicativa que organice movilizaciones en respuesta a las medidas neoliberales que pretenden liquidar lo que queda de educación pública. En esta última crisis el capitalismo internacional tiene como objetivo cambiar sus resortes organizativos y acabar con el llamado “Estado del Bienestar” mediante continuos recortes sociales, privatización del sector público, recortes de libertades y derechos laborales.
La educación no ha sido por supuesto ajena en este proceso, hemos visto como se han impuesto medidas tendentes a la mercantilización de la educación a un paso galopante. En el plano universitario en los años pasados se produjo la implantación del “Plan Bolonia” que suponía la reestructuración de la educación universitaria al servicio de los intereses de la oligarquía europea, este proceso fue aplicado en la universidad española a sangre y fuego en un contexto de movilizaciones generalizadas y luchas estudiantiles intensas que los centros de poder acallaron con una brutal represión, como se pudo comprobar en las movilizaciones de Barcelona del año 2009. Años más tarde la arremetida en contra de la universidad pública se enmarca dentro de la llamada Estrategia Universitaria 2015, cuyo objetivo es avanzar en el proceso de mercantilización de la educación mediante la penetración de las empresas privadas en el seno de la universidad pública, llegando a abrir oficinas en ellas y en el aumento de su influencia a través del “Consejo Social”. Esto dará poder a las corporaciones para influir en el diseño de los planes de estudios y así, orientar la educación a los intereses del mercado.
Este proceso de ataques en contra de la Universidad Pública se agravó de manera exponencial con los últimos recortes presupuestarios aprobados por el Ministro de Educación y la Junta de Comunidades a la Universidad de Castilla-La Mancha. En el curso pasado casi 300 profesores fueron despedidos a causa de estos recortes, se paralizaron la mayoría de proyectos de investigación, no se renovaron instalaciones ni se compro material didáctico nuevo, el personal de PAS y PDI sufrió despidos e importantes recortes salariales. Por su parte vimos como la mayoría de las Residencias Universitarias (uno de los pocos servicios públicos que daba superávit), se privatizaron pasando su gestión que daba beneficios a manos privadas. La subid desproporcionada de las becas ha hecho que lleguemos a pagar hasta 3000 euros por una asignatura de 4º matriculación. El mensaje es claro quieren poner barreras económicas para que los hijos de los trabajadores no puedan asistir a la Universidad.
Ellos quieren imponernos estas barreras desde edades tempranas como podemos ver perfectamente en el espíritu que tiene la nueva ley de educación la LOMCE. Esta ley, lejos de cambiar los métodos pedagógicos y dar mayor aportación y recursos a la educación par así mejorar su calidad, pretende establecer un proceso de reválidas a los estudiantes desde la educación primaria y secundaria que les irá dirigiendo a uno de los itinerarios prácticamente desde los 12 años. Quién no se adapte o tenga dificultad, o por alguna circunstancia no supere las revalidas no obtendrá los correspondientes títulos de la ESO o Bachiller aunque haya superado todas las asignaturas, teniendo que optar por una Formación Profesional devaluada que le convertirá en carne de trabajo precario en manos de todo tipo de buitres. Esta ley a su vez rompe con los restos de democracia interna en los centros educativos como dijo nuestro Ministro de Educación “La educación no puede ser democrática”. Así mismo se asegura y se afianza la financiación pública de los colegios concertados y privados, aunque incumplan normas legales educativas como la coexistencia de alumnos de ambos sexos en las clases.
Es por eso que el Colectivo Estudiantil llama a la comunidad educativa a iniciar una movilización sostenida para tumbar estas medidas. El futuro está en la organización de estudiantes, profesores, padres y trabajadores de los centros educativos. El modelo organizativo del colectivo es asambleario siendo por tanto la asamblea el órgano principal donde se toman las decisiones. Nuestra misión es ayudar a la formación de un movimiento estudiantil amplio y combativo que luche por una educación pública y de calidad.
Nuestros objetivos principales son:
– La lucha contra la mercantilización de la educación y la penetración de empresas privadas en la educación pública.
– La lucha contra la privatización de la educación pública y la financiación de la enseñanza privada con fondos públicos.
– La lucha contra los recortes por una enseñanza pública de calidad.
– En sí, luchamos por una educación pública, de calidad, científica, laica, democrática y gratuita.